Jimena y Juan Pablo, en el pueblo más lindo de Colombia

No es porque me casé en Barichara ni nada, pero Barichara para mí si es el pueblo más lindo de Colombia. Sus ventanas coloridas, sus calles empedradas y su delicioso clima lo hacen un lugar mágico para casarse. Por eso cuando Jimena me dijo que se quería casar allá aunque no corriera por su cuerpo sangre santandereana, sino que era allí donde imaginaba escribir su historia de amor, no pensé dos veces en poderla ayudar a hacer realidad ese sueño.

Ellos querían un matrimonio diferente, que mostrar sus personalidades: sencillo, descomplicado y especial. Por eso todo el concepto giró al rededor de “Fiesta de Pueblo”. Jimena diseñó la invitación y me entregó muy juiciosamente varias cosas que había hecho y comprado como los marcapuestos, los tags de los tarritos de gomitas… DE TODO!! Me encantan las novias pilas e involucradas.
Nos cuenta Jimena: “…la calidez del Taller de Artes y Oficios y de la Iglesia, los moto-taxi, la papayera, la pólvora, la orquesta, los postres típicos, la comida, la decoración, todos elementos que recrearon un ambiente tradicional y auténtico, pero especial.”
Escogieron una paleta que contrastara con el yute: verde menta, aguamarina, fucsia, dorado y muchas telas y cintas con patrones. Velas, faroles, banderines, flores frescas en tonos coral y fucsia, tulipanes y rosas de jardín, centros de mesa en cajas de madera … creo que pueden ver todo el esfuerzo que se llevó a cabo para hacer de este día algo único.

-C